Con la puerta bien cerrada he estado acurrucada bajo una manta todo el día. Será mejor cuando duerma, quiero que todo se detenga en todas partes. Te deseo lo mejor, esa es la única cosa que no saldrá de mi cabeza en todo el día. Yo, que estoy en todas las fotos contigo.. No sé nada y solamente estoy sonriendo. Por mi tonto orgullo, sólo queda una herida más profunda. Lo siento. ¿Por qué sólo me conozco a mi misma? Fotografías que están en mi mano, estás solamente sonriendo en ellas. No volverás de nuevo
Esa curva de tu sonrisa; esa es la curva que más me enamora de ti. Podría quedarme mirándola por horas, incluso navegar por ella, mientras cierras los ojos y paso mi mano por ellos y mirar una vez más esa carita antes de lanzarme a tus hermosos y delicados labios. Noto como podemos sentir ese calorcito en el cuerpo, que de poquito a poquito, nos va pidiendo más. Me niego a no caer en la tentación de tus besos, porque desde antes de besarte, yo ya había caído en el vacío del amor por ti. Estoy a la espera de que seas tú, quien me rescate de mi propia locura, de que termines con esto que acabas de empezar. Pero sinceramente no quiero que lo dejes de hacer. Ya no sé cuanto tiempo más aguantaré cuerda. Es que... ¡muero por ti!